Receta para convertirte en un buen Youtuber

Aquí, en este artículo, encontrarás la receta para convertirte en un Youtuber, si es eso lo que estás deseando. Hemos estado hablando con varios de ellos, y a continuación os exponemos cuáles son los ingredientes que según ellos, hacen falta para convertirse en un auténtico Youtuber.

Ingredientes necesarios:

-Cámara /móvil/ordenador

-Conexión a internet

-Escenario/tu habitación

-Desparpajo

-Ausencia de vergüenza

-Algo que contar

-Buena apariencia física.

-Visitas a tu canal

Esto es lo que nos han contado, pero tras un análisis exhaustivo viendo vídeos de más de 25 Youtubers, creemos que esos ingredientes son relativos, veamos por qué.

Los ingredientes que hacen referencia al espacio físico están claros que son necesarios. Conexión a internet y una cámara para grabarte es obvio que lo necesitas, a no ser que quieras intentarlo por señales de humo, pero eso ya lo intentaron, y salvo a los indios apache a nadie más le funciono.

- Desparpajo. ¿Qué es eso del desparpajo? Desparpajo es espontaneidad, que seas capaz de contarte un chiste imitando a Chiquito de la Calzada o hacerte a ti mismo tres portés imitando a Sia con su candelabro, o en su defecto si estar poseído no te va, hacer la croqueta en la alfombra de tu salón.

- Ausencia de vergüenza. Esto te lo dirá cualquier persona que se ponga ante una cámara, no puedes tener vergüenza, pero ¿has escuchado eso de la profesión se lleva por dentro? ¿Qué quiere decir esto y qué relación puede tener con lo que estamos hablando? no, no consiste en ser médico interno o abogada interiorista no. Esta expresión o dicho, define una estrategia que siguen muchos profesionales que se dedican al mundo público, que consiguen superar su elevada timidez y ponerse ante las cámaras como si nada. Siendo capaces de trolear a todo un séquito de madres detectivescas y que ni una pillara que se está muriendo de vergüenza por dentro y que quiere que la Tierra le trague por completo.

¿Cómo lo hacen? Esto es algo de lo que hablaremos en una próxima entrada, pero la clave está en crearse un papel, actuar un rol que no tiene por qué ser siempre el suyo, que les permite ser como ellos quieren en el momento en el que necesitan, y de esa forma…¡magia potagia! la timidez les da un respiro.

- Algo que contar. Obvio ¿no? Habrá que contarse algo o hacer algo, o bueno… propongo el primer Youtuber mudo! Yo tras mi análisis no he visto ni uno, quizá tenga filón amigos, probadlo y nos contáis.

Mutismo aparte, tenéis que definir la temática de vuestro canal. Qué queréis contar, de qué sabéis, qué os gusta…

Lo mejor es que primero defináis el tema y luego los vídeos irán saliendo. ¿Qué os mola? ¿Os va el mundo gamer? ¿Tenéis mucho viciamen en vuestro interior? ¿Sois más frikis que el primo segundo de Novita? ¿Os va más el mundo monguer? Las guayas, golpes, caídas… ¿os gusta ser un moratón con patas? El mundo beauty… ¿ser bella cual camella? Estas son las temáticas habituales, hay que tener en cuenta que por tanto las más vistas, en el próximo punto profundizaremos sobre esto.

Ser originales nunca sobra y os puede permitir hacer una visita ahí a dentro, a vuestro interior (eco, eco! ¿hay alguien ahí?) y ver que encontráis. Muy probablemente haya cosas que os gusten y sobre las cuales os apetece profundizar más. De esta forma conseguiríais ser un Youtuber auténtico, no una copia de la gran mayoría.

- Buena apariencia física. Pues bueno, ser guapo/a sí y no… y más bien no. Salir limpio, aseado y deslegañado pues sí, aportación importante, pero no es necesario ser guapo/a ni tener un físico determinado... no olvides que lo que muestras es tu tema, tu simplemente eres el medio que le pone voz o expresión.

- Visitas a tu canal. Visitas a tu canal o suscriptores, conseguir esto dependerá de los puntos anteriores y del éxito que tengas, pero es importante que tengas en cuenta que el mundo de la viralización de internet a veces es imprevisible e inexplicable. De repente un vídeo chorra lo peta hasta niveles impensables y nadie sabe por qué.

Y estas son las claves, en próximas entradas os contaremos como superar eso de la vergüenza y la timidez. ¡Hasta la próxima!